martes, 14 de agosto de 2012

DIOS LLAMA, DIOS TE ESPERA




LAS CAMPANAS

¿Las has oído sonar?
Con qué insistencia te suelen llamar,
sobre todo en los pueblos donde nada es igual.
Hay menos ruidos, más calma.
Se puede mejor descansar.

Las campanas son como el teléfono de Dios.
Llaman y llaman sin cesar y parecen no fatigarse jamás.
Su sonido es muy especial,
como una rara melodía que no puedes descifrar,
como si te hablaran a ti en particular.
Alegres en una boda.
Plañideras en un funeral.
Igual pregonan una alegría que una catástrofe nacional.

Las campanas tocan a vuelo.
Anuncian la libertad.
Pero también avisan de una pena.

Ven...ven.. ven, parecen llamar.
Su tañer nos pone a pensar.
Pero nos hacemos del rogar.
A veces al llamado no acudimos.
Tenemos miedo.
Estamos cansados o bien, todo nos da igual...
El Señor no se cansa de esperar hasta el final.

¡Tan¡ ¡Tan¡ ¡Tan¡... Acude, ven.
¡Ya tu tiempo esta por terminar¡...


Autor: Trevit de Alvarez Urquiza

No hay comentarios:

Publicar un comentario